La gestión del rendimiento es clave para evaluar y analizar si tus colaboradores están alcanzando los objetivos propuestos. Una vez que obtienes los resultados, te permite saber qué aspectos deben reforzarse para su desarrollo y crecimiento.
En términos generales, Este proceso, en el marco de una gestión del rendimiento efectiva, constituye la base para ofrecer retroalimentación constructiva a los trabajadores. Conocer su desempeño, de forma cuantitativa y cualitativa, es el primer paso para luego definir un plan de ruta de capacitación.
De acuerdo con reportes de la Oficina Laboral de Estados Unidos, medir el rendimiento y felicitar con fundamento a los colaboradores, es sin duda una buena práctica de retención y fidelización. Sin embargo, hoy en día es muy frecuente que los trabajadores renuncien a sus trabajos por falta de reconocimiento por parte de su líder.
En este artículo, abordaremos todos los puntos críticos que contempla la gestión del rendimiento, considerando que es un proceso clave que toda organización debe manejar.
Aspectos claves de la gestión del rendimiento de los colaboradores
Una correcta gestión del rendimiento de los colaboradores debe contemplar 3 aspectos básicos:
- Los KPI, fundamentales en la gestión del rendimiento, sirven como medidores esenciales del desempeño los cuales deben contener la información necesaria y los datos más relevantes para cada puesto que la organización quiera analizar y evaluar.
- Los colaboradores deben tener conocimiento sobre qué se evaluará y cuáles son los objetivos de cada medición.
- Quien se encargue de hacer la medición, la evaluación y el posterior análisis, debe ser quien acompañe y ayude a los colaboradores en los aspectos que deban mejorar o corregir.
Con la aplicación de estos aspectos, los líderes sabrán:
- Las tareas que realiza cada colaborador.
- Las herramientas que necesitan para mejorar su desempeño.
- Los próximos objetivos a cumplir.
- Abrir nuevas vías de comunicación para brindarle claridad a los colaboradores.
Además de todo ello, es una herramienta para que los líderes puedan comprender y reconocer el esfuerzo de los colaboradores, como medida de motivación, construcción de una experiencia humana y fortalecimiento de la relación compañía/trabajador.
4 técnicas de gestión de rendimiento que debes conocer
Para ejecutar la gestión de rendimiento de tus colaboradores, puedes optar por implementar alguna de las siguientes técnicas:
1. Elección forzada
La elección forzada consiste en realizar un listado de frases positivas y negativas para que el líder elija alguna y la relacione con las tareas del colaborador. Su fin es evitar las generalidades y fomentar la objetividad en las valoraciones.
Algunas de estas frases pueden ir desde “desempeño satisfactorio”, pasando por “cumple con la tarea, pero necesita ayuda adicional”, hasta “no cumple con los estándares esperados”. El supervisor debe elegir entre las opciones y así asignar una visión específica para diferentes acciones o funciones del trabajador.
También cada ítem puede estar acompañado de una puntuación, en escala del 1 al 5, por ejemplo.
2. Escala gráfica
Este método es el más utilizado en la gestión del rendimiento. Al aplicarlo, la persona encargada de evaluar debe evitar cualquier valoración subjetiva.
La escala gráfica se basa en un formulario con líneas horizontales y columnas. En las líneas horizontales, se encuentran los factores de la gestión del rendimiento, mientras que las columnas muestran los grados de variación de los factores antes mencionados.
Es el método más sencillo y su mayor beneficio es que permite cuantificar los resultados y ayuda a compararlos con el resto de los colaboradores de la organización.
3. Investigación de campo
En este método, el responsable de la evaluación se dirige directamente al espacio de trabajo del colaborador. Por lo general, se realiza bajo la supervisión de un gerente. Sin embargo, no es recomendable porque pueden prevalecer los prejuicios y las subjetividades, y el colaborador podría sentirse incómodo o presionado.
4. Entrevista individual
Se trata de un método que se aplica de manera individual y sirve para analizar si el colaborador necesita más herramientas para desempeñar sus tareas.
¿Por qué es importante medir la gestión del rendimiento?
Dentro del marco de la gestión del rendimiento, la evaluación de desempeño es crucial para la mejora continua. Es considerada una iniciativa importante, pues cuando un colaborador aprende y mejora, provoca directamente un aumento de la productividad y un beneficio para las organizaciones.
A su vez, la gestión de rendimiento es la herramienta más sencilla y práctica para que los gerentes de recursos humanos se enteren con certeza de las tareas realizadas y conozcan la manera en que se ejecutan.
Con los resultados obtenidos, es posible evaluar y analizar qué necesitan los colaboradores para sentirse más a gusto en su puesto de trabajo, ya sean:
- Capacitaciones.
- Información.
- Mayor comunicación.
- Respaldo psicológico.
- Flexibilidad del horario laboral.
¿Cómo ayuda la gestión del rendimiento en el crecimiento profesional de los colaboradores?
Como dijimos con anterioridad, una buena gestión del rendimiento permite corregir errores para que las tareas y los objetivos sean cumplidos con rapidez, facilidad y eficiencia.
Por otro lado, en caso de notar un bajo rendimiento de un colaborador, la evaluación permite saber qué necesita esa persona, ya sea a nivel personal o profesional, para cumplir sus objetivos con éxito.
Muchas veces el rendimiento no tiene que ver directamente con la técnica o las herramientas, sino que la persona puede sentirse afectada por el estrés o el cansancio. En este caso, la gerencia de recursos humanos será quien ayude y apoye al colaborador para solucionar el problema que lo bloquea.
Esta práctica de gestión del rendimiento fortalece la confianza y muestra el compromiso de la organización para formarlo como persona y como profesional, le generará un estímulo para mejorar y seguir creciendo.
Conclusión
La gestión del rendimiento es una herramienta que ayuda tanto a los colaboradores como a la organización.
Se trata de un método para saber qué tareas realiza cada colaborador y de qué manera las ejecuta. A través de los resultados obtenidos, es más fácil evaluar qué aspectos debe mejorar para cumplir con mayor efectividad.
Es importante porque cuando un colaborador mejora su desempeño, mejora directamente su productividad y ayuda a las empresas a cumplir los objetivos propuestos. A su vez, la gerencia de recursos humanos podrá ayudar a sus colaboradores y acompañarlos en cada etapa para su desarrollo y crecimiento.
A la hora de implementarla en tu organización, recuerda que existen 4 técnicas de gestión del rendimiento:
- Elección forzada.
- Escala gráfica.
- Investigación de campo.
- Entrevista individual.
¡Ahora ya sabes cómo ayudar a tus colaboradores para mejorar su desempeño y cumplir con los objetivos de la empresa!
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